Patatas Hasselback

Las patatas Hasselback forman parte de la cocina sueca que últimamente se han puesto de moda, en especial porque decoran muy bien el plato. Son simples patatas al horno pero con un corte que las diferencia del resto.

Necesitamos:
• 4 patatas grandes, alargadas
• 100 g mantequilla derretida
• Sal
• Pimienta

Precalentamos el horno a 180 ºC. Escogemos 4 patatas grandes, alargadas y las lavamos. Vamos a laminar las patatas, cortando rodajas de medio centímetro aproximadamente. Hay que tener en cuenta que el corte no debe de ser total, sino dejando un cuarto de la patata sin cortar (la base) para que la “estructura” de la patata Hasselback se mantenga. Una vez hechos los cortes ponemos las patatas en agua fría para evitar que se negreen y para que suelten un poco del almidón que llevan.

Una vez que tenemos tosas las patatas cortadas, las sacamos del agua y con cuidado las secamos con papel de cocina. Las ponemos en una bandeja de horno, encima de papel de hornear. Las abrimos ligeramente y echamos por encima mantequilla derretida. Espolvoreamos sal y pimienta por encima. Tanto la mantequilla como la sal y la pimienta tienen que meterse también entre las láminas de la patata.

Meter las patatas en el horno con fuego abajo unos 15 minutos. Después encendemos arriba también otros 10 o 15 minutos, hasta que se doren por encima. Con un palillo podemos probar si las patatas están hechas, pinchando en la base. Si están blanditas, ya están listas.

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